A DOLORES IBARRURI
(Gente del Pueblo)
Entre medio de tanto dolor,
en aquellos momentos de duelo,
tu palabra llevaba el calor
de esperanza, de paz y consuelo.
Como madre tu viste partir,
a la guerra a tu ser más querido,
para luego saber...¡ay Dolores!...
que de muerte tu hijo está herido.
De tu pecho, lleno de amargura,
nace un grito, fruto de tus venas.
La esperanza florece en tus labios,
de una paz que no tenga cadenas.
Y has busacado incansable la paz
sin tener que vivir de rodillas.
Tu palabra a una tierra la aró
y has sembrado la buena semilla.
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