Según dicen algunas antiguas tradiciones, el árbol de la vida crece al revés.
El tronco y las ramas hacia abajo, las raíces hacia arriba.
La copa se hunde en la tierra, las raíces miran al cielo.
No ofrece sus frutos, sino su origen.
No esconde bajo tierra lo más entrañable, lo más vulnerable, sino que lo arriesga a la intemperie: entrega sus raíces, en carne viva, a los vientos del mundo.
Eduardo Galeano
RAÍCES
Muchos son los que ocultan al mundo sus raíces.
El aparente olvido es una manera de ocultamiento.
Por temor.
Por prejuicios.
Por inseguridad.
Por prejuicios.
Por inseguridad.
Por pudor.
Por falta de autenticidad.
Por falta de autenticidad.
En cierto modo es,a veces, temerario
dar a conocer los verdaderos orígenes.
Los que retratan la identidad,
no el abolengo ni la estirpe.
El simple nacimiento del río ancestral,
corren el riesgo de ser juzgados
o amordazados...
corren el riesgo de ser juzgados
o amordazados...
Pero cuando el " yo" intrínsico
se hace cargo de la dignidad que implica
proceder de madera noble,
altruísta,
justiciera,
valiente,
comprometida.
sin dobleces,
libre ,
apuntalada hacia la búsqueda
de utopías y del bien común,
carente de intereses individualistas,
mezquinos y mediocres...
el follaje se llena de lumbre.
- Baobab: es considerado sagrado en numerosos lugares de África, de ahí que se haya respetado y se encuentren en muchos lugares ejemplares gigantescos.
- En Namibia, los bosquimanos aseguran que son árboles del revés, arrojados así por la divinidad desde el cielo; en Senegal, los griots, guardianes de la memoria de los pueblos, son enterrados al pie de un baobab.
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