" Muertes obreras".

Cuerpos obreros curtidos, dice Carlos Marx;
 “rotos” dicen los propios trabajadores; 
“siniestrados”, dice la ley, de modo impersonal, aséptico, eufemísticamente.

Mendoza.Gualberto Chaira, de 40 años, murió tras caer del techo donde estaba trabajando en una fábrica productora de vinagres en Dorrego, departamento de Guaymallén.

Según trascendió, Gualberto estaba reparando unas chapas del techo del lugar cuando, por razones aún no determinadas, cayó al piso. Socorrido por sus compañeros, fue trasladado al hospital Central, donde murió a las pocas horas. El personal médico que lo atendió, le había diagnosticado politraumatismos graves en el cráneo y otras partes del cuerpo.

Este nueva muerte obrera, se da apenas una semana después de la muerte de Sergio Garro, fallecido tras caer dentro de un tanque en la bodega donde trabajaba. Este año, a su vez, también murieron Carlos Kabaldian, de 19 años, también en una fábrica en Guaymalén; Rodrigo Pérez, de 28 años, quien murió al caer del techo que estaba reparando en una escuela de San Martin; Juan Dotani, un albañil de 75 años murió en una obra en construcción en Maipú y Julio Obiedo, de 42 años, quien murió al caer en la boca de un pozo petrolero en el sur provincial.

Mientras el presidente Macri y el gobernador Cornejo hablan de la "industria" de los juicios laborales, las condiciones de precariedad laboral y la desidia patronal se siguen cobrando vidas obreras en la provincia de Mendoza y el país.

Te puede interesar: Muertes obreras: guerra patronal contra los cuerpos de los trabajadoresFUENTE : La Izquierda diario.