" El verdugo surgió de las urnas..."
Muchos trabajadores de la educación, muchos obreros
y los másss media
apostaron a la frivolidad de los globos amarillos.
Había otras alternativas pero con su característico "síndrome
del glamour burgués", no lo vieron,se subieron al discurso ,reaccionario y mediocre,
y eligieron el peor camino hacia su propia destrucción.
Es la recurrente manía de " sentirse superiores " arrodillándose
ante la derecha.
Penoso espectáculo del servilismo.
Causa estupor ver a tanto proletario colocando en las
urnas el voto al opresor.
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