Fosas cerradas.
Heridas abiertas.
La causa contra el franquismo que instruye en Argentina la jueza María Servini está en un momento álgido. La instructora ha propiciado que, por vez primera, dos víctimas de la dictadura declaren en la Audiencia Nacional. Al tiempo, estudia imputar a varios ministros de los últimos tiempos del franquismo. La instructora ha visitado España para tomar declaración a represaliados y querellantes que no han podido viajar a Argentina ni prestar testimonio por videoconferencia. Hemos seguido muy de cerca los importantes acontecimientos relacionados con la llamada querella argentina contra la dictadura por crímenes de lesa humanidad. La propia jueza, el nuevo fiscal encargado de la causa en Argentina, los abogados de los querellantes y las víctimas han hablado con TM-EX. Teresa Álvarez, de 93 años, es una de las dos personas que prestó testimonio en la Audiencia Nacional. Describe las represalias y torturas que padecieron sus hermanos y padre tras la guerra civil. La otra declarante es Faustina Romeral, de 90 años. Sus padres y ella misma fueron víctimas de las represalias franquistas tras la contienda nacional. Una historia más de persecución y presidio.
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